El origen del término Asamblea proviene de la palabra en latín “Assimilare” que significa “Asimilar”, posteriormente fue adoptada por la lengua francesa y otras culturas, donde nació el vocablo “Asamblea”. La figura de la asamblea fue adoptada por las diferentes civilizaciones a través del tiempo en vista de la necesidad de llegar a un acuerdo en común para mantener los lineamientos dictados por la sociedad.

Una asamblea es una reunión entre varios individuos, dicha reunión es convocada con el fin de tomar una decisión en un tema determinado de importancia relevante, decisión que no puede o debe ser asumida por una sola persona, sino que debe ser en forma conjunta. Las personas incluidas en la asamblea tienen cierto poder o tienen algún permiso explicito para poder pertenecer a ella.
Se puede decir entonces que en una asamblea se busca interactuar comúnmente con el fin de convenir soluciones específicas en el estudio de alguna problemática que afecte a una comunidad, hablando bien sea de una pequeña entidad, una nación o el mundo entero.
Hoy en día se realizan asambleas en diferentes organizaciones o instituciones tanto públicas como privadas sin importar la clase o razón social; sin embargo en la antigüedad las asambleas tenían lugar en el ámbito político, por ejemplo en la antigua Roma eran una de las bases del gobierno. También actualmente se sabe de la existencia de muchas organizaciones democráticas en donde las asambleas son la autoridad máxima al momento de tomar decisiones, ejemplo de estas: una Asamblea Nacional.